Capitulo 53"De viaje"

-No, no te vayas por favor no te vayas…-le pidió Santos, ella accedió al acercarse a el…-Dame un beso…quiero tus labios…te amo….-Bárbara lo hizo, se acerco a el lentamente dándole un dulce y cálido beso.

-Santos…te amo…-de pronto como si nada lo que seria el principio del caos se desato cuando las maquinas dejaron de registrar los signos vitales-Santos? Santos!-Bárbara salió en busca del medico y regreso rápido al lado de Santos-Todo parecía estar pasando en cámara lenta. Lloraba desconsoladamente mirando impotente como el doctor intentaba resucitarlo una y otra vez sin éxito…

Bárbara salió de la habitación de Santos, destrozada, su alma estaba partida en mil pedazos, sintió su corazón palpitarle a mil por hora, las lagrimas corrían libres por su rostro, Alonso la vio y se preocupo de inmediato, fue junto a ella, la vio con sus ojos empapados de lagrimas y casi temblando, pálida...

-Bárbara que te pasa? Que sucede?-le pregunto Alonso tomándola de la cintura para que le hablara.

-Santos...-fue lo único que dijo ella, con la voz entre cortada, y casi en un susurro.

-Que pasa con el?-le pregunto Alonso mirándola en ese estado-Dime por favor...-le pidió pasando una mano por su cabello.

-Bárbara que pasa con el?-pregunto Cecilia mirándola completamente alterada, se preocupo al mirarla, así.

-Santos...-Bárbara no podía ni hablar...

-Que esta pasando?-pregunto Luisana interviniendo.

-Santos...despertó...pero no se que paso, el me dijo que me amaba y luego se desmayo, las maquinas comenzaron a sonar, el medico trato de resucitarlo...Santos no reaccionaba...-Alonso la abrazo fuertemente dejándola llorar en su pecho.

-No, Santo no...-Luisana se abrazo a Maurice.

-No puede ser...Santos no....-Cecilia tenia los ojos vidriosos, Antonio la abrazo, estaban todos en shock y Bárbara no soporto mas, se desvaneció...-Bárbara!-Cecilia se acerco a mirarla.

-Claro todo tiene que girar en torno a ella-Luisana soltó un bufido.

-Luisana cállate...-dijo Alonso.

-A mi no me calles...-le respondió Luisana molesta.

-Te lo digo por que ves lo que pasa y no te callas...-dijo Alonso dejando a Bárbara en el sofá, sin mirarla, Cecilia y Antonio se acercaron a verla.

-Eres un perfecto imbécil...-le reprocho Luisana.

-Luisana por favor...ve la situación..deja de pelear si?-le pidió Cecilia acercándose a el.

-Lo que veo es que ella esta fingiendo...-dijo molesta y rodando los ojos.

-No seas idiota Luisana...-le dijo Antonio alejándose de ella, para ver como estaba Bárbara.

-Bárbara...-Alonso le hablaba para despertarla, no quería que algún medico la viera, por que seguro que la internaban de nuevo, y si eso pasaba ella se pondría peor.

-Vamos no sean exagerados esta mintiendo...-dijo Luisana.

-Prima en serio ya cállate...-le dijo Maurice.

-Bárbara...-Cecilia la acaricio suavemente el cabello, mientras la veía abrir los ojos lentamente.

-Santos...-dijo Bárbara al sentarse en el sofá, pasándose una mano por su cabello.

-Ahí viene el doctor...-dijo Antonio, todos se acercaron para saber noticias.

-Que paso con Santos...dígame que...-a Bárbara se le quebró la voz.

-Señora su marido tuvo un paro cardiaco...-le dijo serio el medico.

-Pero...lo salvaron verdad?-pregunto con su voz cortada.

-De milagro...pero es mucho mejor que haya despertado, ahora esta estable, inconsciente, lo pasaremos a observación, y créanos que estamos haciendo todo lo posible para que el señor se mejore muy pronto...-el medico se fijo en su estado un poco pálida-Señora se encuentra bien?-le pregunto mirándola.

-Si, si, es el susto de pensar que...me siento bien-se excuso Bárbara.

-Segura Bárbara?-le pregunto el medico mirándola.

-Si...Entonces Santos esta bien? Mejor?-pregunto ya mas firme.

-Si, se que el susto que se llevaron fue grande pero logramos estabilizarlo...y esta fuera de peligro por el momento...

-Gracias doctor...-le dijo Cecilia antes de verlo marcharse, todos suspiraron de alivio

-Por tu culpa Santos esta así!-le grito Luisana a Bárbara que arqueo las cejas.

-Por mi culpa?-dijo mirándola retadoramente-Tu que sabes? No estabas ahí idiota!-dijo Bárbara matándola con la mirada.

-Deberías ser tu la que este ahí en lugar de Santos...-le dijo mientras la señalaba.

-Con gusto cambiaria de lugar con el , pero no se puede...y si no quieres estar en una cama de este gran hospital muriéndote mejor deja de provocarme y de colmar mi paciencia muñequita de aparador!-le dijo amenazante.

-Eres una...

-Una que?-Bárbara interrumpió a Luisana-Vamos cobarde dilo..para que te mande a terapia intensiva...-le dijo acercándose a ella, intimidando a Luisana.

-No entiendo como Santos pudo fijarse en una mujer como tu...-la reto Luisana, sacándole una sonrisa a Bárbara.

-Por que mas? Por que me ama...-le sonrió Bárbara maliciosamente.

-Tu lo embrujaste...

-Pues el nunca se a quejado de eso, nunca me a dicho que le desagrade eso...-le dijo cínicamente para provocarla.

-Eres muy poco para un hombre como lo es Santos....

-Por lo menos no ando de resbalosa con hombres casados, y rogándole amor a un hombre que ya dejo mas que claro que no te ama...-le devolvió la estocada Bárbara triunfante.

-No se que abras echo para lograr casarte con Santos...-dijo Luisana.

-Pues que a Santos le gusto mucho mi cama...y me ama, ya ves yo si soy una mujer de verdad...-le dijo ella sonriendo, sacándola mas de sus casillas.

-Lo tienes encandilado con tu cama, pero no te ama, quizá y sienta pasión por ti...pero no amor...yo que tu me cuidaba de eso...-se burlo Lusiana.

-Tu que sabes idiota?-Bárbara se quiso ir encima d ella, y agarrarla a golpes pero Alonso se metió deteniéndola y Antonio detuvo a Luisana.

-Luisana mejor cállate y déjala en paz...-la miro Alonso.

-Y encima eres tan descarada de traer a tu amante cuando tu marido se esta muriendo...-le dijo Luisana, mirando como la mirada de Bárbara se encendía ya Antonio se había apartado de ella.

-Ahora si te mato estúpida!-Bárbara se quiso abalanzar a ella, pero Alonso la sujeto de la cintura deteniéndola, mientras ella forcejeaba para soltarse, hasta que lo consiguió, y se fue contra Luisana, tomándola de los cabellos fuertemente...

-Suéltame maldita salvaje!!-forcejeaba Luisana para quitársela de encima.

-Te lo buscaste pechugona artificial ahora si vas a aprender a respetarme...-Bárbara le dio una cachetada con todas sus fuerzas, dejándola una marca roja en la blanca mejilla de Luisana.

-Bárbara déjala ya!-Cecilia mirando la escena y rogando por que nadie las viera, por suerte que estaban solo ellos.

-No Cecilia, esta estúpida se gano una paliza a pulso....esta idiota me tiene harta!-le dijo Bárbara dándole otra cachetada, pero Antonio la sujeto de la cintura para separarlas.

-Bárbara ya es suficiente...déjala-le dijo tratando de dejar que forcejeara.

-No, Antonio déjame matarla, que aprenda que conmigo nadie y mucho menos una idiota como ella se mete...-dijo queriendo soltarse

-No Bárbara, estamos en un hospital no es momento para que pienses en matarla...-le dijo Antonio sujetándola.

-Ah no? Por que mira que como tengo ganas...-dijo sarcásticamente.

-Yo se...-intervino Alonso-Pero si la matas ahora todos sabrán que fuiste tu, mejor espera a que este fuera de aquí...y ya podrás hacer lo que quieras...-le dijo Alonso tomando su muñeca y mirándola de forma cómplice, con una sonrisa maliciosa.

-Esta idiota se va a tragar sus palabras...anda diciendo que somos amantes...la voy a matar por lengua suelta...-Bárbara la miro y Luisana casi se pone a temblar.

-Y por que te enojas si sabes que es mentira dejarla que piense lo que quiera...esta dolida...-dijo sin mirar a Luisana que estaba matándolo con la mirada.

-Pero es que se merece que le de un buen escarmiento...-le dijo Bárbara molesta, lanzándose contra ella, pero Alonso la sujeto.

-Pues si no e dicho ninguna mentira, este imbécil es tu amante...igual que lo fue Gonzalo y hasta quizá Mauro...-la provoco Luisana.

-Ahora si mátala...-Alonso la soltó, y Bárbara le dio una cachetada a Luisana que hizo que se llevara su mano a su mejilla roja del golpe.

-Escúchame bien idiota...conmigo no te vuelves a meter por que entonces si no quedara ni un solo cabello artificial tuyo...-le dijo tomándola del cabello, y amenazándola

-Bárbara...-Antonio intentaba hacer que la soltara-Suéltala...-le decía sin éxito.

-Si Bárbara no vale la pena que la mates...-intervino Cecilia.

-De acuerdo no la mato, solo la desfiguro...al fin que aquí hay muchos médicos para ella...-dijo al jalar sus cabellos fuertemente haciéndola gritar, hasta que un medico por fin pudo separarlas...

-Señoras están en un hospital! Por favor dejen de pelear y gritar, se pueden calmar? O tendré que pedirles que abandonen el hospital..-les dijo el medico mirándolas a ambas.

-Saquen a esa salvaje que me quiere matar...-dijo Luisana con la mano en su mejilla.

-Puesta salvaje es la esposa de Santos así que la se va eres tu...-dijo Bárbara cruzándose de brazos y sonriendo.

-Luisana si quieres quedarte aquí y saber como sigue Santos mejor deja de buscar provocarla, por que si una de las dos se tiene que ir quien crees que se quedara?-le dijo Cecilia un poco molesta.

-Bárbara vamos...-Antonio le paso un brazo por sus hombros-Vamos a tu hacienda y de paso te calmas un poco si?

-Si, vámonos, quiero ver a mis bebés ya...-dijo caminando con Antonio que le dio un dulce beso a Cecilia.

-Luisana no tientes a tu suerte...-le dijo Alonso sonriendo y esquivando un golpe mientras se reía y se iba detrás de Antonio y Bárbara.

-Pero que imbécil es!-dijo molesta, para luego mirar a Maurice que la miraba con los brazos cruzados-Y tu que me ves?-pregunto soltando un bufido

-Prima...te estas pasando...-la regaño Maurice mientras se sentaban en el sofa.

-Me da rabia pensar que ella ya esta bien, y Santos esta muy grave no quiero, me enfurece saber que ella es la señora Luzardo...ash...-Luisana rodo los ojos.

-El que Santos este mal no es culpa de nadie esta situación...-le dijo Maurice.

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Bárbara, Antonio y Alonso estaban afuera del hospital, platicando y caminando hacia la camioneta, para irse al Miedo, los niños ya estaban ahi al igual que Casilda, Cecilia quería que todo poco a poco fuera como antes...

-Me hubieras dejado matarla o minimo mandarla a una camilla-dijo Bárbara.

-No le des el gusto...-le dijo Antonio sonriendo.

-Pero es que..ashh me saca de mis casillas, y cuando dijo que yo engañaba a Santos, que tenia amantes...en serio si hubiera podido si la mataba...

-Esta dolida...-dijo Alonso como si nada-Esta muy molesta por que Santos no le hizo caso, por serte fiel a ti, por que te ama a ti preciosa...-le sonrió Alonso.

-Alonso tiene razón Bárbara...no le tomes importancia a sus palabras, no se resigna a que Santos la dejo...-le dijo Antonio.

-Esta loca!-dijo ella sonriendo.

-Si...y mucho...-dijo Alonso haciéndolos reír, mientras Antonio abrazaba a Cecilia que llego con ellos...

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Bárbara llego al Miedo y se encontró a las terneras en la sala, Genoveva tenia a la pequeña Barbarita y Alta Gracia al pequeño Félix, hasta que la vieron llegar...

-Doña! Que bueno que ya esta aquí...-la saludo Genoveva, abrazándola, gesto que tomo por sorpresa a Bárbara, pero que correspondió con una ligera sonrisa y cargando a su hija.

-Gracias...ya extrañaba mi casa, y muchísimo mas a mis bebés...-mientras besaba a su pequeña-Y claro también a ustedes muchachas...-dijo riendo.

-Hola princesa...-Alonso acaricio a la nena en brazos de Bárbara, haciéndola sonreír y derritiéndose al ver sus ojitos azules brillar de alegría, igual que los de su mamá cuando sonreía, Bárbara lo dejo cargarla, mientras ella tomaba a Félix.

-A poco no me veo guapísimo con esta niña?-dijo Alonso besándola y riendo, haciendo reír a todos los demás.

-jajaja Pues si te ves guapo...-dijo ella besando a su hijo, y pasando una mano por el cabello de su pequeña.

-Y tu hermosa de mamá...una mamá muy sexy...-dijo pícaramente arqueando las cejas y sonrojando a Bárbara, mientras Cecilia y Antonio y los demás soltaban las carcajadas.

-Alonso Montiel agradece que tienes a mi hija por que si no...-dijo sonrojada.

-Ves como me maltratas mujer?-dijo riendo mientras jugaba con la pequeña.

-Ves que eres un perfecto idiota...-dijo irónicamente mientras cargaba mejor a Félix.

-No le crean muchachas...esta mintiendo ya la conocen..-dijo Alonso de broma, sacado unas sonrisas a todos.

-Bárbara tu no deberías estar recostada un rato?-le regaño Cecilia.

-No, no acabo de llegar y quiero estar con mis hijos...y no pienso volver a la cama...-dijo Bárbara rodando los ojos.

-Haz caso fierecita...jajajaja-se burlo Alonso al darle a la bebe a Antonio, ganándose un golpe de Bárbara.

-Después de tu desmayo...-Cecilia le dio una cálida mirada.

-Tu sabes por que fue ese pequeño desmayo...nada grave, solo un susto, nada Cecilia...-la tranquilizo Bárbara, meciendo a su bebé.

-Pero que terca eres Bárbara!-la miro Cecilia, mientras tomaba con cuidado al pequeño

-Si que terca eres mujer!-dijo Alonso riendo, Bárbara lo tomo de la corbata, y lo miro fijamente.

-Que dijiste querido?-pregunto mirándolo a los ojos

-Que eres una mujer muy hermosa...-dijo robándole un beso en la mejilla

-Por dios ustedes dos son peor que un par de niños!-se burlo Cecilia.

-Mariposa pero por que los interrumpes un poco mas y los hubiéramos visto correr para matarse...-dijo Antonio riendo.

-Bárbara no seas terca y recuéstate aunque sea solo un rato si?-le pidió Cecilia-Acabas de salir y ya estas de un lado a otro...-Bárbara suspiro rodando los ojos.

-No, no, y punto...-dijo decidida-Aunque me des esa mirada...-dijo sonriendo.

-No te cuesta nada Bárbara...asi sirve que descansas un poco..-le dijo Antonio.

-Me cuesta y mucho...-dijo cruzándose de brazos, pero Alonso la cargo, tomándola desprevenida.

-Cecilia abre la puerta de su recamara que la voy a tirar a su cama ajajaja-dijo Alonso con Bárbara en brazos que trataba de que la soltara.

-Alonso eres un imbécil! Bájame ya!-le pidió Bárbara.

-No, ordenes de Cecilia ni modo preciosa...-le dijo antes de entrar a su cuarto

-Te odio Alonso!-le grito ella, antes de que la dejara en la cama.

 -Ni tu te crees eso...-le dijo señalándola y riendo.

-Insufrible!-le dijo ella.

-Tal vez si, pero tu te quedas en esa camita como un ángel si?-le sonrió Alonso mirándola divertido.

-Y yo que tengo de ángel?-pregunto Bárbara sonriendo sarcásticamente.

-Solo la carita mi amor...jajajaja

-Así?-le contesto ella, mirándolo con una pequeña sonrisa.

-Si, por que usted es la tentación echa mujer jajaja

-Que chistosito...mejor vete antes de que te saque yo...-dijo mirándolo riendo.

-Esta bien...te dejo descansar mi diosa...-dijo dejándola sola, al salir del cuarto encontrándose a todos ahí en la sala.

-Creo que eres el único que haría eso..-le bromeo Antonio.

-Si, nosotros nunca hubiéramos conseguido eso...-le siguió Cecilia.

-Ni yo, pero la mujer esta muy ligerita de peso...-dijo riendo al igual que ellos.

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Bárbara estaba en su recamara cuando entro Cecilia y la miro con los brazos cruzados.

 -Y según tu cuanto tiempo tengo que quedarme aquí?-pregunto rodando los ojos.

-Hasta que te vuelva el color a las mejillas...-dijo riendo.

-Todo esto por un desmayo...Cecilia es en serio fue por lo que paso con Santos, nada grave, si fuera otra cosa los médicos lo hubieran dicho...

-Bueno pero hazlo por mi si?

-Si me niego no me dejaran salir verdad?-dijo cruzándose de brazos.

-No, y por favor no se te ocurra fumar…que te conozco..-le dijo Cecilia riendo.

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Alonso se asomo en silencio a la habitación y vio a Bárbara fumando, abrió la puerta de golpe y entro con una sonrisa...

-Que bonito...que haces fumando?-le pregunto cruzándose de brazos.

-Vete...-le dijo soltando el humo.

-Nos vamos...-dijo tirándole su fuete a la cama.

-Que?-pregunto ella tomando su fuete, dejando su cigarro de lado.

-Vámonos antes de que Cecilia te vea...-le dijo sonriendo, Bárbara se levanto de la cama enseguida.

-Esto es por cargarme..-dijo dándole con el fuete.

-Auch!...ya decía yo que estabas bastante recuperadita...-dijo mientras salían del cuarto

-Y a donde vamos?-pregunto Bárbara.

-A que te olvides de todo por un rato...

-Me gusta la idea...-dijo arqueando las cejas-Pero no puedo...-dijo riendo.

-Por que no?-pregunto Alonso.

-Por que acabo de llegar y no quiero dejar

-No hay excusas y no es pregunta...

-Ah no?-dijo arqueando las cejas.

-Los caballos están listos, las terneras me prometieron encargarse de los pequeños...-dijo riendo.

-Alonso eres increíble..-dijo saliendo de la habitación.

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Alonso y Bárbara llegaron al bar del hotel, y en cuanto se sentaron en una mesa, Bárbara pidió un par te tequilas...

-Bueno hermosa...salud por tu salida del hospital y por que Santos pronto salga igual...y este con nosotros...-dijo con una gran sonrisa.

-Salud-dijo chocando sus copas y bebiendo el tequila.

-No sabes el susto que me pegaste Bárbara....

-Exagerado...-dijo mientras les llevaban otros tequilas-Bien que te peleabas con Luisana...-le dijo riendo.

-Un poco...es que es una pesada...-dijo riendo.

-Y tu no?-dijo Bárbara sarcásticamente.

-Un poco...pero Luisana si me rebasa...-dijo sonriendo.

-Y tu te estas quedando en Altamira?-pregunto Bárbara bebiendo un poco de su tequila.

-NO!, Con la pesada de Luisana nunca....-dijo riendo.

-Y entonces? Aquí te estas quedando?-pregunto Bárbara arqueando las cejas.

-No-dijo el encogiéndose de hombros.

-Entonces?-pregunto confundida.

-Compre una casa aquí...-dijo como si nada.

-Me imagino a cuantas ya abras llevado...-dijo Bárbara sonriendo.

-No, como se te ocurre mi diosa, a ese lugar solo entra una...salud!-dijo riendo al chocar su tequila con el de Bárbara.

-Muy bien te creo jajajaja y donde esta esa casa?-pregunto Bárbara sonriéndole.

-Ya te la mostrare, y te daré el tour oficial...-dijo el seriamente.

-Eso si, pero dime algo Montiel...por que demonios compras una casa, si tu no vives aquí...eso es gastar dinero inútilmente...-dijo Bárbara mirándolo.

-Comprar tanta ropa como tu, eso es gastar dinero inútilmente...pero si compre esa casa es por que me gusto y además que dudo que tu y yo podamos discutir lo de...ya sabes que asunto en tu hacienda con tu maridito ahi...-dijo Alonso bebiendo su tequila.

-Astuto plan Alonso...pero quiero conocer tu casa si?

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Bárbara y Alonso llegaron a la casa de el, Alonso abrió la puerta y dejo pasar a Bárbara, mientras el cerraba la puerta, y guardaba sus llaves en su bolsillo.

-Bienvenida a tu casa...-dijo el  haciendo un gesto que la hizo reir.

-Vaya...es agradable el lugar...cómodo...-dijo mirando la casa.

-Gracias deja te doy el tour...y tengo una sorpresa para tus pequeños...-dijo el mostrándole la casa, y sus habitaciones.

-Así? y cual es?-pregunto arqueando sus cejas.

-Es para ellos, no para ti mi amor...-dijo riendo

-Me cambiaste tan rápido Alonso?-pregunto sonriendo mientras se cruzaba de brazos.

-Ya esta bien...te la mostrare...abre esa puerta...-dijo señalando la de una habitación, Bárbara lo hizo, y se quedo sorprendida...

-Alonso esto es muy lindo de tu parte...-dijo girándose a mirarlo.

-Es para Barbarita y Félix...por que los traerás verdad?-pregunto sonriendo.

-Claro que si, Alonso gracias...-dijo mirando los juguetes por todas partes, y dos cunas muy lindas y tiernas en la habitación.

-Admito que no tengo experiencia con los bebés pero quería intentarlo...-dijo encogiéndose de hombros.

-Pues pudiste y mucho...-dijo sonriéndole, pero el celular de Alonso sonó interrumpiéndolos, Alonso lo contesto.

-Alonso?-pregunto la voz de Fabián desde el otro lado de la línea.

-Si, amigo que bueno que llamas....que pasa?-pregunto Alonso.

-Tengo noticias...-dijo Fabián.

-Y cuales son esas noticias?-pregunto Alonso mirando a Bárbara que quería saber que sucedía.

-No son buenas...

-Por que?

-Por que estuve investigando y es verdad...el tal Fidel Castel esta dado por muerto...y según registros su muerte fue a causa de quemaduras, si en los documentos aparece como fallecido no hay forma de saber de el...

-No hay forma de dar con el Sapo....-dijo Alonso alejando el móvil.

-Que? Estas seguro?-pregunto Bárbara

-Ninguna?-pregunto Alonso volviendo al móvil.

-Solo poder conseguir el archivo de su defunción...-dijo Fabián

-Bárbara...dice Fabián que solo consiguiendo sus archivos, documentos y lo relacionado a su muerte podríamos llegar a saber algo de el...-dijo alejando el móvil.

-Préstame el teléfono...-le pidio ella, y Alonso se lo dio-Fabián y donde estan esos documentos?-pregunto ella.

-En unas oficinas de la capital, pero no puedo conseguir que me los den...-le respondio Fabian

-Alguna idea?-pregunto Bárbara.

-Solo conseguirlos nosotros mismos...aunque podrian vernos....y puede que no encontremos gran cosa sobre el Sapo...

-Maldicion...tu crees que funcione?-pregunto Bárbara.

-No se, puede que si pero tambien puede que no...pero es una posibilidad...

-Donde esta esa oficina?-Bárbara escucho lo que le decia Fabian-Gracias Fabian te paso a tu hermano...-le dijo Bárbara,entregandole el movil a Alonso.

-Si?-dijo Alonso, Fabián le repitió lo mismo-Muchas gracias hermano-Alonso colgo la llamada y miro a Bárbara.

-Ese desgraciado si que la supo hacer...-dijo ella pasándose una mano por su cabello

-Tranquila que ese miserable no se salva....

-Como?

-Voy a la capital y ya veremos como conseguimos esos archivos...si es una posibilidad bien vale la pena no crees?

-Nada me voy...nos vamos-dijo Bárbara-Yo voy contigo...

-Pero Bárbara no que no te quería ir de aquí...pensé que querías estar en la hacienda...-le dijo Alonso extrañado.

-Si, pero prefiero acabar de una vez con ese miserable del Sapo, que dejar que pueda lastimar a mi familia...-dijo segura.

-Esta bien...entonces nos vamos a la capital...

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Bárbara y Alonso llegaron a la hacienda...

-Mondragones!-grito Bárbara llamándolos.

-Si Doña?-dijeron apareciendo como de costumbre.

-Escúchenme muy bien, saldré de viaje, y quiero la hacienda bien vigilada, no quiero a nadie merodeando por ahi...no creo tardar mucho, en la noche debería estar de regreso...

-Doña cuente con eso...-dijo Tigre.

-Muchachos si ven a alguien rondando por aqui...lo quiero muerto entendido?-dijo segura de sus palabras-Quiero que vigilen a mis hijos...ya saben como de costumbre alertas de todo...

-Por supuesto que si Doña...-dijo León, Bárbara se dio media vuelta y entro a la casa, Bárbara suspiro al entrar a la recamara de los bebés y se acerco a sus cunas, los miro en silencio, y cargo a Felix,lo pego a su pecho...

-Mi amor...mi chiquito pronto vas a tener a tu papi otra vez, tu padre va a volver a estar con nosotros...asi va a ser...-decia meciéndolo entre sus brazos, después de unos minutos entro Cecilia al cuarto y la vio en la cama, mirando y acariciando a los bebés con la mirada perdida, ausente...

-Bárbara estas bien?-le pregunto acercándose a ellos, y sentándose en la cama acariciando a la nena-Que te pasa?-pregunto mirándola.

-Nada....estoy bien solo que los extrañaba mucho-dijo besando la frente de su hijo.

-Segura? Te noto algo...rara...

-Si lo que sucede es que todo esto de Santos me tiene muy preocupada...

-Igual a mi....no quisiera que se repitiera el susto de hoy...-dijo Cecilia acariciando a su sobrina.

-Cuando pense por un momento que el...-Bárbara bajo la mirada y miro a su hijo-No se que haria sin el, si le pasa algo, Santos es mi vida, el hombre que amo y creeme que ya no sabría vivir si me llegara a faltar...-dijo ella triste, Cecilia la abrazo tiernamente, con esa mirada tan cálida que solo ella tenia.

-Se va a poner bien...ya veras...-le consoló ella.

-Cecilia tengo que salir de viaje a la capital...

-Que?

-Si por unas cosas de la hacienda y tengo planeado volver hoy en la noche...no quiero estar lejos de aqui pero problemas con la hacienda es lo que menos necesitamos en estos momentos...quiero que cuando Santos salga del hospital y regrese a esta casa todo sea como antes...-dijo con una expresión ausente.

-Bárbara esta sucediendo algo mas?-pregunto Cecilia.

-No, nada...

-Es que siento como si te preocupara algo mas...-dijo mirándola con una dulce mirada, Bárbara se dio cuenta que en ese tiempo Cecilia vaya que había llegado a conocerla y mucho...su viejita estaría feliz de eso....sonrió al pensar en ella

-No, no pasa nada, solo que no quiero irme ahora...no quiero estar lejos por Santos, y no quiero dejar a este par de chiquillos...-dijo ella riendo al besarlos.

-Tu sabes que Barbarita y Félix están en buenas manos con Antonio y conmigo...

-Lo se, yo se que ustedes son maravillosos con mis hijos...y se los agradezco mucho, Santos y yo no hubiéramos podido elegir mejores padrinos que ustedes...

-Gracias a ti por dejarnos estar tan cerca de ellos, y de ustedes...

-Cecilia eres un verdadero ángel...y bueno una mama excelente...Toñito te adora...-le sonrió Bárbara.

-Tu no te quedas atras, eres una maravilla con estos niños, y bueno mi hijo igual te adora...

-Cecilia gracias por estar ahi siempre con nosotros...

-Los quiero mucho y me preocupa lo que pase con ustedes...sabes que cuentas con nosotros...somos familia...-le sonrió Cecilia mientras la abrazaba, Bárbara se sintió un poco mejor, por ningún motivo podía dejar que el desgraciado del Sapo, les hiciera daño...

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Bárbara y Alonso llegaron a la capital, al bajar del avión, los estaba esperando una camioneta negra, lista para ellos, en cuanto se subieron pudieron ver que era Fabian el que los esperaba...

-Hermano..perdón por hacerte venir...-le dijo Alonso cerrando su puerta.

-No te preocupes que tampoco es que me guste mucho estar encadenado al hotel...-le bromeo Fabian,saludando de beso a Bárbara.

-Fabián que gusto verte...-le dijo Bárbara.

-El gusto es mio...-le sonrió el dulcemente.

-La idea que se nos ocurrió aquí a Fabián y a mi...no creo que te agrade mucho...-dijo Alonso arqueando las cejas, Fabián y Alonso le explicaron todo a Bárbara que solo los escuchaba con una ceja arqueada y con una sonrisa maliciosa.

-Pues...es genial, y creo que hay buenas posibilidades de que funcione...-dijo ella riendo.

-Ves Alonso te dije que la idea no le molestaría...-dijo Fabián riendo.

-De acuerdo pero ten cuidado no te me vayas a pasar hermano...-dijo Alonso cruzándose de brazos haciéndolos reír a los dos.

-Creo que esto va a ser mas fácil de lo que pensé...-dijo ella mirando el lugar.

-Si...tenemos ventajas, que no ay mucha seguridad...eso si lo pude arreglar...un amigo dejo listo todo para que podamos sacar los archivos, sin que sea muy complicado-dijo Fabián.

-Sigo diciendo que no me gusta que sea Fabián el que entre contigo...-dijo Alonso rodando los ojos.

-Tranquilo hermano...-dijo Fabián-Prometo no aprovecharme...demasiado jejejeje-Fabian y Bárbara bajaron de la camioneta y entraron al lugar mientras, con una sonrisita que Bárbara le regalo al oficial de la puerta fue suficiente para dejarlos pasar sin ningún inconveniente, Fabián soltó una pequeña sonrisa...

-Menos mal que vine yo y no Alonso...-dijo riendo por lo bajo, sacándole una sonrisa a Bárbara, se acercaron a donde estaba una muchacha que por lo visto era la recepcionista, Fabian sonrio y se acerco a ella, mientras Bárbara solo lo miraba, hasta que Fabián sonrió mirándola como señal de que podían pasar...

-Aun me sigue sorprendiendo eso...-dijo ella riendo al caminar, pero se toparon con otra joven, a su lado estaba la oficina abierta, Fabián se la señalo y ella sonrio, Fabian se acerco un momento a la señorita...

-Santos mi amor perdóname por esto pero es por nuestro bien...-dijo a si misma suspirando.

-Disculpe señorita se encuentra su jefe?-pregunto Fabián con una sonrisa encantadora.

-No señor, lo siento pero el esta fuera...-Bárbara rodo los ojos, y se acerco a Fabián.

-Y tienes novia?-le pregunto la joven a Fabián.

-Mi amor hasta que pude llegar...-Bárbara le dio un beso, enredando sus manos en su cuello, mientras Fabián pasaba las suyas por su cintura, abrazándola, la joven los miraba sorprendida, cuando se fijo que por la puerta venia entrando otro hombre igual muy atractivo, que se fue directamente hacia la pareja que ya habia dejado de besarse y miraba a ese hombre....

-No te atrevas a volver a tocarla...-Alonso le dio un golpe a Fabian que lo miro y se lo devolvió.

-No estaría tan seguro...-dijo Fabián contra el.

-Basta los dos! Cálmense-Bárbara se metió entre ellos, pero no pudo lograr separarlos, la joven al ver aquello llamo a los guardias que estaban en ese piso y los separaron, Alonso se les soltó y se acerco a Bárbara tomándola de la cintura fuertemente pegándola a el, y dándole un buen beso...un beso que en principio tomo por sorpresa a Bárbara pero que termino correspondiendo de buena gana, Alonso enredo sus dedos en los largos cabellos de Bárbara, que aunque no entendía por que termino enredando sus brazos en el cuello de Alonso, la joven secretaria miraba todo con la boca  mas que abierta,y Fabian estaba en shock aquello no era planeado, sin saber por que sonrio...

Bárbara y Alonso se separaron, y fue cuando Fabian se le fue encima a Alonso,los guardias estaban tan ocupados en separarlos que no se dieron cuenta de en que momento Bárbara se metió discretamente a la oficina y buscaba la carpeta...

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Los Mondragones estaban en los alrededores del Miedo, cuando escucharon unos ruidos de pisadas, León saco su revolver en silencio, Tigre hizo lo mismo...se acercaron con cuidado de no hacer ruido y se encontraron con un hombre que estaba mirando al Miedo...León y Tigre le apuntaron directo a la cabeza con sus armas...

-Quien diablos eres  y que haces espiando la hacienda de la Doña?-pregunto León con el arma ya lista para disparar.

-No...no disparen...-dijo el hombre, sintiendo todo su cuerpo tensarse.

-Que quieres aquí? Quien te mando?-pregunto Tigre.

-Nada...nadie me mando...

-Nadie?-pregunto León moviendo su revolver a la cien del hombre-Seguro que no te mando nuestro viejo amigo...Fidel Castel...-dijo León mirándolo.

-No voy a decir nada...-dijo el hombre tratando de mantenerse firme.

-No es necesario...-dijo Tigre.

-No me maten...yo solo cumplo ordenes...-dijo el hombre pálido.

-Sabes que la Doña nos ordeno matar a quien se escondiera por ahí...-dijo Tigre jugando con el miedo del hombre.

-No...no....por favor....

-Mi hermano tiene razón....y si las ordenes de la Doña no se cumplen...

-Ella se enfadaría mucho...-le completo Tigre a León.

-Así que como son ordenes de la Doña...-dijo León con el arma a punto de apretar el gatillo.

-No...por favor...

-Nosotros solo cumplimos ordenes...-le dijo León antes de dispararle, y viendo como caía el cadáver a sus pies.

-Veamos que tiene este pobre desgraciado..-dijo Tigre sacando de sus ropas un celular, una foto, y un pequeño papel, con la dirección, y el nombre nuevo del Sapo...

-La Doña tenia razón..-dijo León.

-Si...prepárate hermano por que tendremos guerra por aquí muy pronto..-dijo Tigre, antes de hacer desaparecer de ahí el cuerpo sin vida de ese hombre, y guardando las cosas que habían encontrado para darselas a la Doña en cuanto regresara...

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Los guardias sacaron del edifico a Fabián y Alonso, Bárbara metió la carpeta en su bolso, y estaba por salir cuando la puerta se abrió dejando pasar a la joven secretaria que la miro extrañada de verla ahí...

-Señorita...que hace usted aquí?-le pregunto la joven,mirandola de pies a cabeza.

-Como comprenderá no pretendía quedarme ahí afuera presenciando esa estúpida pelea...-dijo Bárbara arqueando las cejas.

-Claro se le armo verdad señorita?-le pregunto la joven con un gesto amable.

-No tienes una idea...-dijo ella con una ligera sonrisa, al morderse su labio inferior.

-Ya los sacaron...asi que puede estarse tranquila...-le sonrio la joven.

-Créame siempre e estado tranquila-dijo Bárbara sonriendo mientras se dirigía a la puerta.

-Como se llama señorita?-pregunto la joven.

-Doña Bárbara Guaimaran...-dijo ella girándose a mirarla...

-Bárbara Guaimaran?-pregunto la joven, tratando de recordar su nombre, pero no, no lo había escuchado...

-Doña Bárbara...-dijo ella, antes de irse sin decir mas, con una sonrisa de satisfacción...

-Que mujer tan linda pero muy altanera...aun así que suerte tener a dos guapos como esos de galanes...-dijo la joven cerrando la puerta y saliendo de  la oficina...

-Doña Bárbara...-dijo la joven mirando la puerta por la que ella acababa de salir con ese aire de altivez que siempre tenia...

Continuara...